Sunday, June 24, 2007

Hoy...

Volví a ese lugar
Recordé la primera y la segunda vez.
La misma calle de pasillos
El mismo olor dibujado en pálidos rostros
El mismo color de las paredes
ese blanco triste y sucio.

Un extraño vacío
como el que cayó en ese agosto mareado
revivir por un momento el hastío
de mis movimientos vetados.
Encerrada en una cárcel de saltos y bailes
Caminé lento y no seguro hasta esos huesos
operados más tardes
por besos y sueros

Y hoy vuelvo a recorrer
el mismo lugar
el mismo olor
la misma gente
Parece que nada cambia en ese público hospital…
Aunque ya no queda
ni restricción al movimiento
ni huesos enfermos por los que me pueda desvelar.