Entre dos… y hecho a medias[1] [1 de Noviembre 2006]
Nos perdemos en las armonías de un orden desorganizado, algo que nuestra mente ha creado… basándose en un supuesto soñado. Nos dejamos llevar por el fresco viento que alivia las heridas, sinfonías que acallan la agonía, mas no entendemos que queremos, que seremos… ¿Sofía o entendimiento?
Mientras tanto vuelve la locura: la aurora- otra vez- oscura… aquí me tienes, con estrés, el negocio de este mes; el que se vende en la tele, la radio y también en los diarios. Un vidrio que se empaña y que la mente nubla y daña… nada que ver con lo que en la vida es bello, una enfermedad que te pone la soga al cuello. Pero no te precipites pites, no te desesperes Pérez; a todos nos queda un destello y debemos luchar por ello. Sabes que aunque el humo no te deje ver, siempre te acordarás de ayer.
Recordaremos las palabras desgastadas, manchadas, manoseadas, reclamadas, esperadas, odiadas, envenenadas, pisoteadas, marginadas; con tantas hadas como sueños de odio contra dueños, de bellas doncellas rescatadas, esperanzas de días plenos, de edificios y casas aplastadas.
Con esas mismas lucharemos por provocar un encuentro… no miento, lo siento. Insisto, es tu opción, tus armas… tu elección; no es tu obligación, es distinto… es tu instinto. Sufriremos, lloraremos, no mucho rato… esperemos. Sin embargo marcharemos, gritaremos, trabajaremos, el desdén del aire venceremos. Y en el intento de crear un lenguaje de miradas… la unión de frases respiradas… no moriremos. Te prometo, eso haremos.
Cuántas veces la angustia te mece, la oscuridad crece y la nada florece. Estaremos duros como roca, pero suaves como mi lengua en tu boca. Avanzar hacia el placer que nos toca, hacia la dicha de ser, aunque para muchos eso sea cosa poca. Sabemos lo esencial y todo aquello que puede ser especial, estamos claros que para surgir y renacer solo basta con amar, aunque eso signifique arriesgar todo al confiar. Por supuesto, sin descuidar ni pisar el velo cuando los recuerdos se convierten en traiciones de alto vuelo.
Y no es solo algo que hay que pensar, es necesario actuar… sobretodo cuando se agota el plazo estipulado para terminar. Diez treinta en el reloj, si no pagas lo que debes te tiraste, perdiste tu lugar en el momento en que pestañeaste… pero tranquilo que hay segundas chances, almas que te esperan a la salida de los malos trances, manos que te conducen por otros parques, no te preocupes; a ésta altura, las cosas malas ya pasaste.
No necesitamos letras que canten historias felices ni un futuro comiendo perdices, mientras sea verdad eso que no dices. Todos tenemos tesoros guardados con sellos de hierro, pero escodemos las llaves… no por avaricia, menos por codicia, es solo que nos come el miedo... ¿Y si el temor muta en desenfreno? ¿Qué más da si los candados se derriten con las caricias que transforman el mundo en real, en algo bueno? ¿Hay algo más que pueda importar? No creo, el resto solo es veneno.
Nacer para crecer, desarrollarse, quizás reproducirse y perecer. ¿Trascender? ¿Ascender? ¿Quién lo puede entender? Nos quedamos trastocados sin capacidad de responder, de creer en las posibilidades que nos quedan por conocer. Por eso la simpleza y la importancia de ser, para maravillarse y entender el por qué sin tener que ceder, solo disfrutando de cada amanecer.
Somos lo que fuimos pero no te olvides del futuro, que nada tiene que ver con progreso, retroceso o el llanto en algún rincón oscuro… es algo mucho más puro. Su incertidumbre nos guía, nos saca del camino recorrido y en vista de tanta armonía desaparece esa agonía, me trae la alegría que pensé que no existía cuando esto, en nuestras vidas, todavía no se escribía.
Y es que no hay palabras que representen lo que no se ha vivido, si eso pretendiéramos estaríamos perdidos tratando de nadar en las aguas del sin sentido. Sepan que no estamos arrepentidos de los pensamientos compartidos, mas de diez horas y ni el almuerzo, el tentador manjar o el sueño nos han abatido., no nos rendiremos; seguiremos, no nos perderemos; siempre aprenderemos y nuestras experiencias uniremos en esto que, entre voces y canciones representa lo que hemos sentido, lo que queremos de ésta estación… un poco de calor y un paseo por la playa para aliviar el dolor.
[1] La elección del título nada tiene que ver con el contenido del texto, para nosotros las normas formales de titulación son un pretexto. Se llama así porque terminamos de escribir a las dos y media… ojo… nótese… para variar el asunto rima, y aunque el título no corresponda, eso es algo que se estima.
